MONICIÓN: XXXI DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
MONICIÓN: XXXI DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO
Ciclo B
ENTRADA: Bienvenidos queridos hermanos. Nos reunimos
para celebrar la Santa Misa, en el trigésimo primer domingo del tiempo
ordinario. Hoy recordamos que nuestro mayor amor es
Dios, el cual se manifiesta en nuestro testimonio de amor al prójimo. Al
participar de esta Eucaristía pidamos a Dios que nos ayude a vivir como
verdaderos hermanos. En pie, cantamos.
PRIMERA LECTURA: La plegaria que escucharemos resume toda la Ley en el amor total y absoluto
a su único Dios y Creación. Prestemos atención.
SALMO:
Yo te amo,
Señor; tú eres mi fortaleza.
SEGUNDA
LECTURA: San Pablo nos recuerda que Jesús no conoció el
pecado y sin embargo siempre intercede ante el Padre en favor nuestro. Prestemos atención.
EVANGELIO: Jesús
nos recuerda el primer y más grande de los mandamientos de la ley. Puestos en pie, cantamos el Aleluya.
OFERTORIO: Al llevar nuestros dones de pan y vino al altar nos compromete a
hacer vida el mandamiento nuevo que Jesús nos dejó como signo visible de querer
ser sus discípulos. Acompañamos cantando.
COMUNIÓN: Acerquémonos a recibir el Cuerpo y la
Sangre de Cristo. Sólo Él puede hacernos crecer en nuestra entrega,
comprometida y solidaria. Acompañamos
cantando.
DESPEDIDA: El Señor nos ha insistido en
la necesidad de escuchar en profundidad. Abrámonos a la buena nueva del
Evangelio para poder así transformar nuestro mundo en el Reino de Dios. Nos despedimos cantando.
Comentarios
Publicar un comentario