Monición VI DOMINGO DE PASCUA- Ciclo C - 25 de mayo de 2025

 

VI DOMINGO DE PASCUA 

Entrada: Hermanos y hermanas, bienvenidos a participar del SEXTO DOMINGO DE PASCUA. La Liturgia de hoy, nos vuelve a hablar de amor. Del amor de Jesús y del que el Padre nos profesa. Nosotros hemos de responder, tanto para Dios como para los hermanos, con el mismo amor surgido de lo más hondo de nuestro ser.  En pie cantamos.

 

PRIMERA LECTURA: En la lectura del Libro de los Hechos de los Apóstoles, escucharemos el relato del Primer Concilio de la Iglesia en Jerusalén. Lo que deciden es fruto del Espíritu Santo. Escuchemos con atención.

 

SALMO RESPONSORIAL:

 

R. Oh Dios, que te alaben los pueblos,

que todos los pueblos te alaben.

 

 

SEGUNDA LECTURA: La descripción de la Jerusalén del cielo es muy bella y llena de esperanza, porque su luz es Dios y su lámpara el Cordero. Prestemos atención.

 

EVANGELIO: Jesús nos promete el Espíritu Santo, el Paráclito, que nos lo enseña todo y vela por la Iglesia y por sus hijos. Y nos dice que, si le amamos, Él y el Padre, vendrán a nosotros y se quedarán para siempre. En pie cantamos el Aleluya.

 

OFERTORIO: Señor, ante tu altar presentamos los dones de Pan y Vino, ellos por acción del Espíritu Santo, se convertirán en tu Cuerpo y en tu Sangre, expresión infinita de tu amor, que realiza tu deseo de quedarte con nosotros para siempre. Acompañamos cantando.

 

COMUNIÓN: Hermanas y hermanos, Jesús, Pan de Vida, se nos ofrece en este Divino Sacramento, Él es Paz, Verdad y Salvación. Acerquémonos a participar de este Banquete Eucarístico. Acompañamos cantando.

 

DESPEDIDA: Hermanos, nuestra celebración ha terminado. Hemos renovado nuestra fe en la promesa de Jesús, que envía al Espíritu Santo, para que esté siempre con nosotros. Dicho Espíritu nos impulsará y animará a ser buenos discípulos y testigos. Nos despedimos cantando.