MONICIÓN: SOLEMNIDAD DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN - 8 DE DICIEMBRE 2024

 

MONICIÓN:  SOLEMNIDAD DE LA  INMACULADA CONCEPCIÓN

 

 

ENTRADA: Hermanos Bienvenidos. Hoy celebramos la SOLEMNIDAD DE INMACULADA CONCEPCION DE LA VIRGEN MARÍA. Nadie, como Ella, nos puede indicar mejor los caminos que nos llevan a la Navidad. Su pureza, su alma limpia, su interior lleno de Dios son motores que nos impulsan hacia una Navidad vivida con autenticidad cristiana. Se ponen en pie, cantamos.

 

PRIMERA LECTURA: Ya en los albores de la creación, Dios anuncia la salvación. Es el primer anuncio de la Buena Nueva: el Hijo de Dios que compartirá nuestra condición humana. Prestamos atención.

 

SEGUNDA LECTURA: Las  palabras de San Pablo, en la segunda lectura son un canto de esperanza: nos manifiestan la predestinación de todos los hombres a ser hijos en el Hijo. Escuchemos.

 

EVANGELIO: El mismo Señor, en las palabras del Ángel, nos devuelve la esperanza de la salvación. En pie, cantamos el aleluya.

 

OFERTORIO: Iniciamos la Liturgia Eucarística. Con este pan y este vino queremos llevar hasta el altar nuestra vida entera, para que, ayudados por la Virgen Inmaculada, transformemos nuestro corazón y seamos siempre una ofrenda a Dios. Cantamos.

 

COMUNIÓN: Hermanos, Jesús es  el Pan de vida y  nuestra esperanza; que nuestra participación en la Sagrada Comunión nos fortalezca y nos acompañe siempre. Cantamos.

 

DESPEDIDA: Hermanos, la fiesta de María Inmaculada, en medio del Adviento nos ha dado –seguro—fuerzas renovadas para convertirnos al Señor que viene. Jesús, el Salvador está cerca. El Niño Dios nacerá en Belén para la salvación de todos sus hermanos. Nos despedimos cantando.